Cada día es más frecuente encontrar un trabajo que te permita trabajar desde tu propia casa, pero esto además de las ventajas evidentes que supone también trae consigo dificultades y retos a superar que trataremos de desvelar en este artículo sobre cómo trabajar desde casa de un modo productivo y eficiente.
Ponte un horario
Una de las ventajas que muchas personas creen que tiene trabajar desde casa es que te puedes poner tu propio horario, además de poder modificar la jornada laboral diaria y la hora de inicio o final cuando te plazca. Pues bien, esto puede hacerse pero es un error que hará que comiences a acumular una gran cantidad de trabajo que ya deberías de haber realizado y que luego te obligara a realizar largas e intensas jornadas laborales al final del mes.
Lo ideal es marcarte un horario fijo al igual que tenias en tus anteriores trabajos presenciales y ser riguroso cumpliéndolo todos los días.
Se par a ti mismo un jefe exigente
Cuando no tienes un jefe que te vigile te será demasiado fácil escaquearte y aunque esto puede parecer algo positivo en realidad no lo es. Si no cumples los objetivos que te marque tu jefe independientemente de que te vea o no trabajar serás despedido o despedida, por lo que a falta de un jefe que te controle tendrás que ser tu mismo el que evite que el vago que todos llevamos dentro tome el control y te haga perder tu nuevo empleo.
Crea un zona de trabajo en tu casa
Otra recomendación ampliamente consensuada para trabajar desde casa eficientemente es separar el trabajo del descaso. Para ello has de crear un rincón o zona en una habitación que será tu lugar de trabajo y en la que siempre trabajaras. De este modo no te dará la impresión de siempre estar trabajando o de siempre estar descansando.
Evidentemente si tienes habitaciones libres en tu domicilio puedes usar una de estas habitaciones para crear en ella el ambiente laboral diferenciador que necesitas para separar el ocio del trabajo.