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Los germinados de cereales y otras semillas germinadas son un alimento rico en multitud de nutrientes, y además, la calidad de estos nutrientes es excelente debido a que los germinados son una comida viva.
Si te alimentas regularmente con germinados de lentejas, soja, brócoli, alfalfa u otras semillas, mejoraras tu salud en general, tu sistema sanguíneo, el funcionamiento del corazón, tu sistema nervioso, órganos respiratorios y sobretodo el tracto gastrointestinal. Es una de las mejores formas de rejuvenecimiento.
Además, los germinados son una alimento muy fácil de cultivar tu mismo, y para demostrártelo te explicaremos cómo hacer germinados de semillas sanos y deliciosos, y gracias a que los vas a cultivar tu mismo, estarás seguros que están libres de químicos y pesticidas.
Cómo hacer germinados paso a paso
1 Para comenzar a hacer nuestros germinados caseros comestibles revisamos las semillas. Tiramos todas que son dañadas, enfermas, y todas basuras que aparecen.
2 Ponemos las semillas en un recipiente, llenamos de agua y removemos. Recogemos todas las semillas que flotan y las tiramos.
3 Tiramos el agua usando un colador para no perder ninguna semilla, y volvemos a rellenar el recipiente con agua, esta vez usamos agua filtrada, y dejamos las semillas en remojo durante 8 o 12 horas.
4 Lavamos de nuevo las semillas usando un colador.
5 Ahora lavamos bien la tela del algodón (o de lino) y la ponemos encima de una batea, quitamos las arrugas de la tela, y encima de ella colocamos las semillas, desplázanoslas bien por toda la superficie.
6 De vez en cuando regalos las semillas con ayuda del pulverizador. Usa agua filtrada, no agua del grifo.
7 Cada 12 horas hay que repetir la operación de lavar las semillas con ayuda del colador, y el tejido no es la excepción. El proceso de la germinación tiene un ambiente agradable para la reproducción de las bacterias y para evitar los hongos y bacterias hay que relavarlo por la mañana y por la noche.
8 Cada cereal o semilla tarda un tipo diferente en germinar, así que para hacer germinados caseros has de ser paciente y perseverante. Repite el proceso de germinación que te hemos indicado y vera que tarde o temprano aparecen los primeros brotes de tus semillas. No obstante, puedes comenzar con germinados de lentejas o de trigo que son más fáciles de hacer y menos caprichosos.
Necesitas
- Cereales no pelados: trigo, espelta, alfalfa, trigo sarraceno, lentejas.
- Un germinador o una batea.
- Un pulverizador para regar a los germinados.
- Agua filtrada.
- Una tela fina de algodón y un colador para lavar los germinados.
Consejos y advertencias
- Puedes añadir los germinados en desayunos, ensaladas, bocadillos y comerlos sin añadir cosas, saborearlos tal como son.
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